“Cada uno, por propia voluntad, ofrezca a Dios algo extraordinario en la alegría del Espíritu Santo ….. Y espere la santa Pascua con un gozo lleno de anhelo espiritual” (R.B. 49, 6.7b)
“Nadie busque lo que juzgue útil para sí, sino lo que más conviene al otro” (R. B. 72, 7)